LIZARD CRASH – Lizard Crash (2008)

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Lizard Crash era o es, no me queda claro, una banda de Ribeira (A Coruña) creada en 1996 con el nombre de Dark Minds y en el 2001 se cambiaron de nombre a Lizard Crash, con este nombre grabaron dos demos y este larga duración en el 2008. Dije que no me quedaba claro si seguían en activo porque en la Metal Archives pone que siguen en activo pero en su cuenta de Facebook desde el 2015 no hay publicaciones, por lo menos en el momento de hacer esta reseña.
Juzguemos pues este trabajo de la banda que tiene sus cosas positivas pero también mucho aspecto negativo que lastra casi todos los temas. Lo positivo es que tienen cierto gancho en las composiciones y ahora empecemos con los aspectos negativos.
El primer aspecto negativo es que la banda no tiene un estilo definido, algo muy común en un álbum de lanzamiento, intentando contentar al mayor número de público posible. Power melódico nacional de toda la vida, Heavy Metal clásico y hasta Speed Metal, les faltaba definir su apuesta.
El segundo problema y quizás el más grave de todos es la producción de este álbum que realmente es muy floja sobre todo en cuanto a la voz del cantante que se escucha en un segundo plano. El tercer problema es la simpleza de las composiciones, demasiado vista y son ritmos demasiado previsibles con un sonido de batería flojo y un bajo que no aporta nada y un teclado que tiene sus momentos de lucidez pero que en otros temas está desubicado.
Buscan siempre la aceleración en sus temas y le ceden todo el protagonismo a su guitarrista que como solista tiene sus buenos momentos, de hecho diría que los solos de guitarra son lo mejor de este trabajo. Son catorce temas y veo muchos rellenos, quizás en el formato de ocho temas este disco sonaría más compacto. Por último decir que la mezcla de temas en castellano y otros en inglés, en este país nunca funcionó y menos en la época en la que fue editado el álbum. Tienen o tenían algo especial que tienen feeling y no es nada fácil salir desde Ribeira, lo tienen muy complicado por motivos geográficos, las bandas gallegas siempre estuvieron alejadas del meollo donde se mueve la escena metalera, así que tiene doble mérito este lanzamiento.