01. You Won’t Take Me Alive
02. Taste Like
03. We Can Rule The World
04. Shock
05. Love Is A Fire
06. California Summer Song
07. Forever Loving You
08. The Mission
09. Tied To The Tracks
10. Afterlife
11. I Want Everything
12. Comfort Zone
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Jeff Keith – Cantante
Frank Hannon – Guitarra
Brian Wheat – Bajo
Troy Lucketta – Batería
Dave Rude – Guitarra
Siempre es un placer reseñar los álbumes de Tesla. Banda de Sacramento creada en 1981, siempre fueron diferentes a todos. Debutaron en 1986 con “Mechanical Resonance” donde ya demostraban su personalidad y obtenían el puesto número 32 en el Billboard. “The Great Radio Controversy” de 1989 presenta un mayor nivel de complejidad en la composición de sus temas y “Psychotic Supper” de 1991 es sin duda el álbum de su vida a nivel de popularidad.
Pero si hay un álbum que para mi gusto es definitivo ese es el “Bust a Nut” de 1994 aunque así no lo consideran los fans, es un álbum donde nos encontramos la esencia del rock de los setenta a lo Led Zeppelin, baladas supremas, rock sureño, Heavy Metal o Hard Heavy y hasta progresivo, yo diría que es el álbum más completo de su carrera.
“Into the Now” del 2004 tiene sus momentos y recupera esa producción moderna, la pesadez en las guitarras y un aire más metálico igual que en el “Forever More”, su último trabajo hasta la fecha, “Simplicity” baja algo el nivel respecto a sus dos anteriores trabajos.
Son como una familia pues llevan juntos muchos años el único fichaje es el de Dave Rude a la guitarra. Cinco años tuvimos que esperar para su nuevo trabajo. You Won’t Take Me Alive pues es lo que decía la banda en la previa, no engañan nunca a nadie, son muy sinceros y profesionales. Dijeron que iban a darle un tratamiento de Pop a los estribillos y así han hecho.
Los Tesla pretenden sonar más comerciales que nunca y siguen con la misma senda con el alegre Taste Like con un estribillo con unos coros que te recuerdan a los AC/DC. Siempre fueron una banda de baladas aunque nunca se lo han reconocido y Jeff Keith es un cantante atemporal con carácter por el cual no pasan los años. La balada llega con We Can Rule The World y es una decepción máxima, jamás pensé que diría esto de una balada de Tesla la verdad. Keith está lineal, balada con acompañamiento a piano y arreglos sinfónicos que recuerda a los Guns and Roses del Chinese Democracy con un coro Aor agudo y pomposo que ahoga el tema.
Ni rastro de energía, Shock tampoco la tiene, presenta un inicio con una caja de ritmos que recuerda a lo Queen en temas como Innuendo y después tira de un medio tiempo con un riff excesivamente sencillo y un cambio de ritmo donde arrancan con un ritmo sureño, buena construcción pero demasiado sencillo para los Tesla que siempre estuvieron un paso o dos por encima del resto de bandas de Hard Rock, a nivel técnico me refiero.
Lo que pasa es que las webs que hacen reseñas de Tesla pues ya se quedan con el nombre, se escuchan el álbum por encima y le dan un nueve, es de vergüenza, se hacen reseñas en webs españolas solo por el nombre de la banda ya se les da un sobresaliente y no se comenta el álbum pero en Metalbrothers.es somos profesionales. Love Is A Fire es la segunda balada del disco, agua de nuevo con otra balada acompañada de piano pero con una marcha más en la batería. Sacar dos baladas seguidas es muy mala idea y más si es un tema como California Summer Song que está en tierra de nadie, acústico, Pop con aire Country también… ¿Qué tiene que ver esto con Tesla? aún me lo pregunto.
Cuarta balada del álbum y tercera seguida con Forever Loving You esto no se aguanta. En este caso es un refrito de las baladas del “Bust a Nut”, al menos nos recuerda a los viejos tiempos pero instrumentalmente no tiene nada, acompañamiento sinfónico y acústico sin más historia.
Cuando intentan retomar la senda rockera lo hacen con The Mission un tema sin gancho y lo que es peor, en el plano instrumental muy plano, en serio que jamás pensé que escribiría una reseña así de los Tesla, el cambio de ritmo y la introducción acústica salva el tema de la quema, siempre tienen algún momento de genialidad.
Tied To The Tracks es el clásico rock oscuro y más neoyorkino que angelino con mucha aspereza en los riffs con su distorsión tirando de un medio tiempo y con excesivos arreglos en el estudio de grabación, no es que sea un mal tema, simplemente no les pega nada.
Afterlife arranca con unas guitarras dobladas con esa esencia del metal ochentero europeo, algo que hacían en los ochenta pero es un espejismo, pues enseguida recuperan los coros agudos y azucarados y la senda del Southern Rock más relajado. Al menos I Want Everithyng pese a su esquema sencillo, no deja de ser un tributo a los AC/DC solo que mucho más elaborado, decía que al menos nos encontramos con algo de energía en las guitarras, muy al estilo de los Def Leppard.
Confort Zone no aporta nada y además es un título para el tema que sería el resumen perfecto de lo que pasa con este álbum “zona de confort”. Es el peor álbum de los Tesla en toda su discografía pero de largo, de hecho diría que es el único mal álbum en la discografía de Tesla, por lo que se les perdona y esperaremos que remonten vuelo en el siguiente.
No tiene pegada, es aburrido, en el plano instrumental hay cero riesgos, te matan la intensidad y entran en bucle con una serie de baladas seguidas que son sosas, no tienen sentimiento, el aire Pop del álbum en vez de resultar adictivo resulta soporífero. Muy mal álbum pero no pasa nada, son los Tesla y es la primera vez que se resbalan, seguro que para el próximo vuelven a su nivel.