CD1:
01. La Sombra de la Bestia
02. La Momia
03. El Bastión del Diablo
04. La Canción del Pirata
05. Legendario
06. Séptima Estrella
07. Pegaso
08. David y el Gigante
09. Kamikaze
CD2:
01. El Canto de las Sirenas
02. El Amor de Mi Vida
03. La Leyenda del Holandés Errante
04. La Mano de Dios
05. Para Siempre
06. Héroe
07. Tu Misión
08. Hermano del Viento
Roberto Gonzalo – Bajo y coros
Ángel San Juan – Guitarras y voces
Arturo Morras – Guitarras y coros
David Karrika – Batería
Juanan San Martín – teclados
Los últimos tiempos de Tierra Santa, sus últimos trabajos, dejan un saldo muy negativo. Los metaleros tenemos la mala costumbre de comparar los primeros álbumes de una banda veterana con los últimos, no lo deberíamos hacer por varias cosas. Ni los momentos creativos que pasa un músico nunca son iguales, ni las exigencias del mercado discográfico (son los sellos los que orientan a las bandas a sonar de una forma determinada) son los mismos.
Sus dos anteriores trabajos se mueven en terrenos muy melódicos donde solo brilla y para eso, de forma muy esporádica, el gran guitarrista que es Arturo Morras, por cierto, abandonó la banda en el año pasado y los Tierra Santa van a editar un nuevo álbum a finales del 2017 con guitarrista nuevo, veremos como les sale la historia.
Este doble álbum es un trabajo sin ninguna historia. Son sus clásicos regrabados que pasaron sin pena ni gloria. Por lo tanto me tengo que fijar en su anterior álbum. Un trabajo que por momentos rozaba el Aor y el Hard melódico que no sentó nada bien a sus fans. La pregunta es ¿qué nos ofrecerán en su nuevo álbum, un disco de Heavy Metal o seguirán en su línea más melódica? y sobre todo, ¿qué papel jugará el nuevo guitarrista? Lo tiene realmente difícil, porque sustituir a Morras no es nada fácil, él es el alma mater de la banda, o era… cuesta acostumbrarse.
No creo que los Tierra Santa tengan una carrera tan dilatada para regrabar sus temas más clásicos. Repasan toda su trayectoria, exceptuando el álbum “Medieval”, que supuso su debut del que se olvidan y diría que de forma injusta, porque aunque suena muy ingenuo por momentos, es un álbum en el que los Tierra Santa nos dejaron sus mejores momentos acústicos, de la mano de Morras, como no. También se olvidan por completo del álbum “Mejor morir en pie”, cosa que me parece muy mal, pues aún tenía un buen puñado de temas, no como su último trabajo, “Mi nombre será leyenda”, que no hay por donde cogerlo. El caso es que después de un trabajo tan flojo como su último, los sellos discográficos siempre reaccionan y lanzan algo para pasar el mal trago, pero un doble recopilatorio con temas regrabados y sin ningún tema inédito, o algún tema en directo… no me tiene sentido y más cuando ya existe un recopilatorio que recoge los grandes éxitos de la banda del 97 al 2007, otro nuevo paso para atrás de los Tierra Santa.